Comprar una nueva TV es emocionante, pero también puede convertirse en un quebradero de cabeza si al llegar a casa te das cuenta de que… ¡es demasiado grande para tu salón o se ve diminuta en esa pared enorme!
Elegir el tamaño adecuado de televisor es fundamental para disfrutar al máximo tus series, películas o partidos, sin forzar la vista ni perder calidad. Muchos piensan: “¡cuanto más grande, mejor!”, pero si eliges mal, puedes terminar con una TV gigante que te incomode o con una pantalla demasiado pequeña para tu salón. En este artículo te explicamos de manera sencilla cómo acertar con el tamaño de TV perfecto para tu salón o sala de estar.
No se trata solo de “mientras más grande, mejor”. Un televisor demasiado grande para la distancia de visualización puede resultar incómodo. Tendrás que mover el cuello o los ojos constantemente, y hasta podrías notar cierta fatiga visual. Por el contrario, si compras uno demasiado pequeño, perderás detalles y no aprovecharás la experiencia inmersiva y envolvente que ofrecen hoy los paneles 4K o 8K.
Para TVs 4K (la mayoría actuales), se recomienda usar esta fórmula sencilla:
Tamaño recomendado (en pulgadas) = Distancia desde el sofá (en metros) × 25
Por ejemplo:
Si tu sofá está a 2,5 metros del lugar donde pondrás la TV:
2,5 m × 25 = 62,5 pulgadas
Lo ideal sería un televisor de 55 a 65 pulgadas.
Si eres de los que buscan una sensación tipo cine en casa, puedes usar un factor un poco mayor:
Tamaño (pulgadas) = Distancia (m) × 40
Por ejemplo:
2,5 m × 40 = 100 pulgadas
Eso solo es recomendable si tienes un salón amplio y el espacio físico para colocar un televisor tan grande o un proyector.
Si todavía piensas en un televisor Full HD (1080p), tendrás que estar un poco más lejos para no notar los píxeles, así que usa un factor de:
Tamaño (pulgadas) = Distancia (m) × 20
Ejemplo:
2,5 m × 20 = 50 pulgadas
Aunque hoy en día, prácticamente todos los televisores grandes (a partir de 43”) ya son 4K, así que la regla ×25 es la más práctica.
Piensa en el espacio total.
Mide el ancho y alto disponible del mueble o pared. No solo por la TV: recuerda que los marcos (bezels) también suman. Verifica que el televisor no sobresalga del espacio que tienes.
Altura de visión.
Lo ideal es que el centro de la pantalla quede a la altura de tus ojos sentado. Si colocas la TV muy arriba, terminarás con dolor de cuello.
No olvides la estética.
Una TV demasiado grande en una pared pequeña puede verse desproporcionada, igual que una pequeña en un salón enorme puede perder presencia.
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